2025: el año en que improvisar salió caro

Reflexión de cierre de año, del notario Luis Gabriel Palacios Velasco sobre decisiones, riesgos, cambios sociales y tecnológicos que marcaron el ejercicio del derecho en 2025.

12/29/20252 min read

El 2025 permitió observar con mayor claridad un fenómeno que se ha venido gestando desde hace años: la distancia creciente entre el ritmo de los cambios sociales y tecnológicos y la preparación real de las personas para enfrentarlos jurídicamente.

Desde la práctica notarial, este año deja una conclusión contundente: la improvisación, en el contexto actual, tiene un costo cada vez más alto.

I. La transformación silenciosa de la vida cotidiana

Las relaciones comerciales y patrimoniales son hoy más formales que nunca. Existen más contratos, más registros y más herramientas legales disponibles, y muchos procedimientos se han vuelto incluso más accesibles gracias a la digitalización.

Sin embargo, este avance convive con una realidad social distinta: una parte significativa de la población no cuenta con acceso suficiente a información clara, educación jurídica básica ni acompañamiento profesional para utilizar correctamente estos instrumentos. El resultado es una formalidad aparente sostenida sobre una comprensión limitada de sus consecuencias.

II. El rezago en la toma de decisiones

A lo largo de 2025 se repitió un patrón constante: decisiones que debieron tomarse a tiempo fueron postergadas, acuerdos relevantes permanecieron sin formalización y documentos indispensables quedaron incompletos.

No por falta de normas, sino por rezago en cultura jurídica, exceso de confianza y desconocimiento de los riesgos reales que implica la omisión.

III. Nuevos riesgos en la era digital

La digitalización amplió oportunidades, pero también zonas de vulnerabilidad. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2025 del INEGI, el fraude fue el delito con mayor incidencia en México, con 7 mil 574 casos por cada 100 mil habitantes, lo que refleja la magnitud del problema en la vida cotidiana y en las decisiones patrimoniales de hogares y empresas.

En el ámbito específico de bienes raíces, datos combinados de CONDUSEF y Profeco reportaron un incremento del hasta el 34 por ciento en fraudes inmobiliarios, confirmando el impacto cuantificable de estas prácticas en el mercado.

Además, que dichos esquemas delictivos vienen apoyados actualmente de herramientas de inteligencia artificial, que dificultan la detección de engaños.

Estos fenómenos no son excepciones: son parte estructural del nuevo entorno social y económico.

IV. La función notarial ante un entorno más expuesto

Frente a este escenario, la función notarial adquiere un valor aún más relevante como espacio de control, verificación y certeza. La actualización constante de procesos, el fortalecimiento de los mecanismos de autenticidad y el acompañamiento técnico a la ciudadanía se vuelven piezas clave para reducir el impacto de estos riesgos.

Reflexión

2025 deja una enseñanza inequívoca: en una sociedad que cambia más rápido que su propia preparación jurídica, improvisar ya no es un error menor, sino un riesgo estructural.

El nuevo ciclo exige decisiones informadas, acceso real a conocimiento jurídico y una cultura de responsabilidad frente a la ley. La certeza no se hereda: se construye.

Luis Gabriel Velasco Palacios

Notario, titular de la Notaría Pública Número 80 en Cancún